Tras confirmar el piso en los $6.000, las acciones de CCU comenzaron a entregar las primeras señales de recuperación, gatillando nuestras señales de compra tras romper al alza la resistencia de los $6.500.
En la sesión del martes, las acciones subieron sobre el 2% confirmando la ruptura de la resistencia menor en los $6.800.
En estos momentos, la acción se encuentra bajo una fuerte presión compradora que podría llevar al papel en busca de sus máximos del año en torno a los $7.800.
Un cierre sobre la próxima resistencia de los $7.000 gatillaría nuevas órdenes de compra que impulsarían a la acción en busca de los $7.800 en el corto plazo.
Mantenemos la recomendación de compra mientras la acción siga cotizando sobre el soporte de los $6.500.
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