Las acciones chilenas cerraron el mes de abril con un avance del 3,6%, extendiendo una racha alcista de tres meses consecutivos de ganancias, período en el cuál el IPSA acumuló un retorno del 13,6% (febrero-marzo-abril).
En estos momentos, las acciones chilenas se encuentran testeando la zona de resistencia representada por los máximos del IPSA alcanzados en octubre del 2013 en torno a la zona de los 3.950 puntos, por lo que la bolsa local se encuentra presionada por toma de utilidades luego del 14% de avance en tres meses.
A la baja, el IPSA podría ir a testear el soporte menor en la zona de los 3.800 puntos en primera instancia, mientras que una caída por debajo de dicho nivel debería llevar a la bolsa local a testear la media móvil simple de 50 días, que en estos momentos define un piso en torno a la zona de los 3.773 puntos.
Por su parte, los indicadores técnicos RSI y MACD muestran fuertes signos de debilidad en el corto plazo, por lo que podríamos ver fuertes caídas si el IPSA no es capaza de mantenerse sobre el piso psicológico de los 3.800 puntos.
Debido a la presión vendedora de corto plazo en el IPSA en torno al nivel psicológico de los 3.900 puntos, es recomendable reducir la exposición en la bolsa local y volver a entrar en el IPSA con la confirmación de la ruptura de la zona de resistencia en los 3.950 puntos.
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