Las acciones nacionales retrocedían levemente en la sesión pero acumulaban un retroceso del 1,5% en lo que va de septiembre.
Sin embargo y a pesar del retroceso, el principal índice accionario chileno sigue operando sobre una importante línea de tendencia alcista de corto plazo, la que actúa como soporte en torno a la zona de los 3.900 puntos.
Técnicamente, la tendencia alcista de la bolsa local sigue intacta mientras el IPSA mantenga sus cotizaciones sobre la zona de los 3.900 puntos, por lo que un fuerte rebote técnico por sobre dicho nivel debería gatillar nuevas órdenes de compra en el corto plazo e impulsar a las acciones chilenas en busca de la resistencia en la zona de los 4.100 puntos.
Por su parte, los indicadores técnicos RSI y MACD se encuentran operando en torno a los mínimos de julio, por lo que podríamos ver un fuerte rebote técnico en el corto plazo.
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