Por Rodrigo Cordero
Las acciones chilenas finalizaron con avances en la sesión del jueves tras perder cerca de un 9% en las últimas semanas.
Luego de fallar la ruptura de la resistencia de los 5.200 puntos por una fuerte ola vendedora tras el estallido de protestas por demandas sociales, el principal índice accionario chileno confirma la ruptura del piso técnico de largo plazo definido por la media móvil de 50 meses, presionando al IPSA en busca de los mínimos de agosto en torno a la zona de los 4.600 puntos.
A la baja, una caída de más de un 2% por debajo del soporte de los 4.600 puntos debería gatillar nuevas órdenes de stop loss y presionar a las acciones chilenas en busca del siguiente piso técnico en los 4.200 puntos.
Los indicadores técnicos RSI y MACD, en temporalidad mensual, siguen operando a la baja, sin entregar aún señales claras de recuperación, por lo que se esperan nuevos ajustes de corto plazo en un escenario de menor apetito por riesgo.
Al alza, un avance por sobre los 4.750 puntos podría gatillar un mini rebote técnico hacia la zona de resistencia de los 5.000 puntos. De todas maneras, el sesgo bajista se mantiene intacto mientras el IPSA siga operando bajo la media móvil simple de 50 meses.
