El oro subía el jueves en una volátil sesión, impulsado por una fuerte demanda física y el avance del euro, aunque los inversores se mantenían cautos en torno al metal tras la intensa volatilidad de los precios de este mes. El oro al contado ganaba 0,7 por ciento, a 1.619,19 dólares la onza.
El lingote fluctuaba mientras los mercados financieros asimilaban la votación en Alemania, que aprobó el jueves nuevos poderes para el fondo de crisis de la zona euro, en medio de temores de que las autoridades aún carezcan de un plan conjunto para resolver los problemas de la región.
Las preocupaciones sobre la capacidad de las autoridades de la zona euro para resolver las dificultades financieras del bloque fueron un factor clave que dispararon al oro a un récord de 1.920 dólares este mes.
Pero desde entonces el metal ha sufrido por la inestabilidad del mercado, que forzó a los inversores a vender sus tenencias de oro para cubrir otras pérdidas.
El euro subía contra el dólar tras la votación alemana, aunque frenó ganancias tras datos que mostraron que el número de estadounidenses que pidió el seguro por desempleo cayó a su nivel más bajo desde abril.
Técnicamente, el oro se encuentra cotizando en un piso bastante fuerte en torno a la zona de los 1.600 dólares la onza. Una fuerte ruptura sobre los 1.650 dólares la onza podría entregar el impulso necesario al oro para comenzar un nuevo rally al alza en busca de sus máximos históricos.
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