La paridad dólar/peso chileno retrocedía con fuerza en la primera sesión del año, confirmando la ruptura del soporte definido por el nivel de los $615.
A la baja, el próximo soporte de corto plazo esta definido por el nivel de los $590, por lo que podríamos seguir viendo ajustes en las próximas sesiones.
Los indicadores técnicos RSI y MACD operan a la baja en zona de sobreventa, pero sin entregar aún señales claras de recuperación, por lo que el sesgo bajista se mantiene intacto y deberíamos ver pronto al billete verde operar bajo la zona de los $600.