Acciones globales muestran claras señales de debilidad tras cerrar pésimo semestre

Entre tensiones comerciales de Estados Unidos con China, con bancos centrales reduciendo los estímulos monetarios y con algunas señales de enfriamiento en el crecimiento económico, los principales mercados accionarios han sufrido una fuerte liquidación de activos, que ha llevado a borrar cerca de un billón de dólares de capitalización en el índice mundial del MSCI.

El alza del dólar y un salto del 16% de los precios del petróleo han desempeñado un papel importante en este ajuste de mercado y han afectado especialmente a los mercados emergentes.

Las acciones chinas entraron en terreno bajista esta semana, después de haber caído cerca de un 20% desde sus máximos de enero, mientras que los índices de mercados emergentes de MSCI han caído un 8%. Por su parte, los bonos emergentes en dólares y monedas locales han caído un 6% y un 5% respectivamente.

Como China es el mayor consumidor de productos industriales, la debilidad de su economía ha contribuido a las caídas de un 9 y un 15% del precio del cobre y del zinc, por lo que considerando que la la tensión con Estados Unidos no van a desaparecer de un día para otro, es muy probable que la debilidad mostrada por los principales mercados accionarios se mantenga.

El 2009 el MSCI All Country World Index inició un movimiento alcista de largo plazo que se ha mantenido intacto por cerca de 10 años. Sin embargo, el ciclo alcista ha mostrado dos correcciones importantes por toma de utilidades, que han significado para el índice perder entre un 20% y un 25% el 2015 y 2011 respectivamente.

En lo que va del año, el MSCI ACWI ha retrocedido mas de un 9% desde sus máximos de enero, con los indicadores técnicos RSI y MACD (en el gráfico de cierres mensuales) entregando claras señales de venta, por lo que podríamos estar dentro de un proceso correctivo hacia la zona de soporte de los 440 puntos, representada por la media móvil simple de 55 meses, lo que dejaría espacio para nuevos ajustes en las bolsas mundiales con un potencial de caída de un 13% desde los niveles actuales.

Recomendamos reducir la exposición en renta variable para evitar exponerse a un ajuste mayor en los mercados accionarios.