A pesar de que en horas de la mañana, el cobre subía por sólidos datos económicos en Estados Unidos, que impulsaron la confianza en los inversionistas de que podría empezar a repuntar la demanda por metales industriales de los países desarrollados, el metal rojo terminó con una caída del 0,17% ubicándose en los US$3,1085 la libra.
La debilidad del dólar entrega soporte a los precios de los metales. Un dólar bajo hace más baratas las materias primas denominadas en esa divisa para los tenedores de otras monedas.
Ultimos datos de la economía estadounidense han sido positivos, lo que ha alimentado las expectativas de una recuperación tras la crisis global.
Los inversionistas siguen de cerca las señales económicas luego de que la crisis afectó la demanda de metales básicos, dejando a China como el mayor soporte para el mercado.
Los precios de los metales básicos también rebotaban porque empezaban a disiparse temores por una política monetaria más severa en China.
El cobre fue golpeado a fines de enero por los temores de los inversionistas por las señales de un endurecimiento en la política monetaria de China, el mayor consumidor mundial de metales industriales.
Contribuyendo al panorama positivo, los inventarios de cobre en la Bolsa de Metales de Londres cayó por segundo días consecutivo, rompiendo una tendencia al alza que se instaló desde mediados de julio.
Los inventarios cayeron 675 toneladas a 540.475 toneladas. Al finaliza la semana pasada, los suministros del metal crecieron cerca de 543.500 toneladas, para marcar su mayor nivel desde febrero último.
Fuente: Reuters
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