La endeudada Grecia lanzó el jueves una emisión de bonos clave e instó a Alemania y a otros socios europeos a enviar una clara señal de confianza en Atenas a los mercados financieros, lo cual le permitiría pedir prestado a tasas más bajas.
Un día después de anunciar fuertes medidas de austeridad, el Gobierno salió al mercado con un bono en euros a 10 años, con un precio guía en el área de los «mid-swaps» más 310 puntos básicos, dijo el agente colocador.
Atenas, que debe financiar 53.000 millones de euros este año (72.430 millones de dólares), necesita con urgencia los fondos para pagar sus deudas y cubrir su rojo fiscal, pero el costo será alto.
El precio guía ofrece una prima de más de 20 puntos básicos respecto del nivel en el que cerraron el miércoles los diferenciales frente a los seguros bonos alemanes.
El Gobierno buscaba un máximo de 5.000 millones de euros con esta emisión. Las órdenes habían alcanzado los 7.000 millones de euros en la primera hora de apertura de los libros, precisó el funcionario.
El comisario europeo de Asuntos Económico, Olli Rehn, dijo que los países de la zona euro tomarían medidas coordinadas de ser necesario para garantizar la estabilidad de Grecia y evitar un contagio a otros miembros del área con problemas presupuestarios.
Rehn dijo a un diario italiano que los ahorros extras por 4.800 millones de euros anunciados el miércoles eran suficientes para el 2010, siempre y cuando sean implementados completamente.
El viceministro griego de Relaciones Exteriores, Dimitris Droutsas, pidió un apoyo político más que financiero, justo cuando Atenas intenta bajar sus altos costos de endeudamiento.
La emisión del jueves es un examen crucial antes del período que va entre el 20 de abril y fines de mayo, cuando Grecia necesita pedir prestado o refinanciar 20.000 millones de euros.
Sin un apoyo más concreto de la UE, sus costos de endeudamiento podrían dispararse aún más por la falta de confianza en los planes del Gobierno para reducir el déficit fiscal.
El primer ministro George Papandreou se reunirá con la canciller alemana Angela Merkel en Berlín el viernes, pero Alemania ya aclaró que no se discutirá ninguna ayuda financiera.
Rehn dijo que la zona euro tenía los recursos suficientes para asegurar la estabilidad, en caso de ser necesario. Al ser consultado si esto implicaba un rescate para Atenas, respondió: «No estamos hablando de esto hoy. Grecia se ha reactivado bien».
Otros países tanto en el sur como en el norte de Europa también experimentan algunos problemas. «El objetivo de todo esto es precisamente evitar un efecto contagio de un país a otro», explicó Rehn.
Droutsas recordó que el Gobierno griego aspira a reducir su déficit presupuestario a un 8,7 por ciento del Producto Interno Bruto este año desde el 12,7 por ciento del 2009.
«Somos muy optimistas de que con la correcta implementación de este paquete de ahorros podemos alcanzar la meta en el 2010. Esa es nuestra obligación y algo que el Gobierno griego está tomando con mucha seriedad», dijo el funcionario en la entrevista.
La UE elogió el nuevo paquete de medidas de Grecia y dijo que Atenas podía contar con la solidaridad europea. Pero Alemania, cuyo respaldo es clave para cualquier ayuda, ha evitado comprometerse con un rescate financiero.
Fuente: Reuters
Dejar una contestacion
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.