Las acciones europeas cedían en las primeras operaciones del martes después de nueve jornadas de ganancias, una vez disipada la euforia en torno a una mayor flexibilidad anunciada por China para el yuan y con inversores recogiendo beneficios tras máximos de siete semanas.
A las 0831 GMT, el índice FTSEurofirst 300 de las principales acciones europeas perdía un 0,38 por ciento, a 1.051,40 puntos, tras alcanzar el lunes su máximo desde comienzos de mayo luego del anuncio del banco central chino de que permitirá una mayor flexibilidad para el yuan.
Los grandes bancos estatales chinos mantuvieron el yuan controlado el martes, un día después de su mayor apreciación desde que la moneda fue revaluada en el 2005, indicando que Pekín permitirá que el yuan se aprecie mucho más lentamente que lo que piden sus críticos en Occidente.
Las acciones de firmas financieras estaban entre las que más descendían, y el índice STOXX Europe 600 del sector perdía un 1,17 por ciento. Barclays, BNP Paribas y Societe Generale perdían entre un 2,4 y un 4 por ciento.
También perdían terreno los papeles de compañías productoras de materias primas tras las subidas de la víspera, impulsadas por expectativas de que la demanda de materiales industriales y combustible crecería en China tras las novedades cambiarias.
Las mineras BHP Billiton, Antofagasta, y ENRC perdían entre un 1,9 y un 2,4 por ciento, mientra que las energéticas BP, BG Group y StatoilHydro caían entre un 1 y un 2,8 por ciento.
Los inversores también esperaban con cautela el anuncio del presupuesto británico, que se conocerá más tarde. El ministro de Finanzas, George Osborne, anunciaría grandes recortes de gasto y alzas en los impuestos, en lo que sería el presupuesto más ajustado en una generación y una prueba de fuego para la nueva coalición de gobierno.
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