El petróleo descendía el viernes por los datos de un suministro amplio aunque estaba apuntalado por una tormenta caribeña que podría avanzar al Golfo de México, donde se ubican muchas instalaciones petroleras y BP sigue tratando de resolver su derrame.
Las dudas por la fragilidad de la recuperación económica global antes de una cumbre del Grupo de los 20 países también pesaban sobre los precios y afectaban a los mercados internacionales.
Antes de la cumbre del G20, el índice MSCI de las acciones mundiales descendía y las acciones europeas pasaron a territorio negativo, después de abrir con ligeras alzas.
Los valores del petróleo han disminuido desde unos 87 dólares a comienzos de mayo, ante las preocupaciones por la economía de la zona euro y también por los datos de un amplio abastecimiento del recurso natural.
Se prevé que el petróleo estadounidense promedie 79,86 dólares el barril en el 2010, mostró un sondeo de Reuters, una ligera caída desde la encuesta de mayo y la segunda proyección mensual consecutiva más baja después de más de un año de previsiones en alza.
En Estados Unidos, la existencias de crudo y subproductos siguen mucho más altas que hace un año.
Los elevados inventarios pueden ofrecer un amortiguador para reducir las escaladas de precios en caso de que el mal tiempo provoque perturbaciones. Ese fue el caso cuando los mortales huracanes Katrina y Rita golpearon a la costa estadounidense en el Golfo de México en el 2005.
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